Los beignets son una delicia clásica de la repostería, conocidos por su textura suave y esponjosa. Hoy te traemos una versión casera con un toque especial de canela y naranja que te encantará. Estos beignets son perfectos para una merienda o un desayuno especial, y lo mejor es que son muy fáciles de hacer en casa.
Ingredientes para Beignets Caseros con Canela y Naranja
Para preparar estos deliciosos beignets caseros, necesitarás los siguientes ingredientes:
- 2 huevos
- 450 g de harina de trigo: La harina será la base de nuestra masa. Asegúrate de tamizarla para evitar grumos y conseguir una textura suave.
- 150 ml de leche tibia: La leche tibia activará la levadura y ayudará a obtener una masa esponjosa.
- 100 ml de aceite de girasol: Este tipo de aceite es ideal para freír por su sabor neutro y su resistencia a altas temperaturas.
- 100 g de azúcar: Aporta dulzura a la masa.
- Ralladura de 1 naranja: La ralladura de naranja le dará un toque cítrico y fresco a los beignets.
- 2 cucharaditas de canela en polvo: La canela añadirá un sabor cálido y especiado, que combina perfectamente con la naranja.
- 1 sobre de levadura seca (7 g): La levadura es crucial para que los beignets queden bien esponjosos.
- 1 pizca de sal: La sal es necesaria para equilibrar los sabores.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla: Añade un toque aromático que complementa la canela y la naranja.
- Aceite para freír (girasol): Necesitarás suficiente aceite para sumergir completamente los beignets durante la fritura.
- Azúcar glas para espolvorear: Este toque final les dará un aspecto irresistible.
Cómo Preparar Beignets Caseros con Canela y Naranja
1. Preparación de la Masa
Lo primero que debemos hacer es preparar la masa de nuestros beignets. Para ello, sigue estos pasos:
- Disolución de la levadura: En un bol grande, disuelve el sobre de levadura seca en los 150 ml de leche tibia. Deja reposar la mezcla durante unos 5 minutos o hasta que veas que empieza a espumar. Este es un signo de que la levadura está activa y lista para trabajar.
- Mezcla de ingredientes húmedos: A la mezcla de leche y levadura, añade los 2 huevos, los 100 g de azúcar, los 100 ml de aceite de girasol, la ralladura de naranja, las 2 cucharaditas de canela, la pizca de sal y la cucharadita de extracto de vainilla. Mezcla bien todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea.
- Incorporación de la harina: Poco a poco, comienza a añadir los 450 g de harina de trigo tamizada a la mezcla. Es importante hacerlo de manera gradual mientras vas amasando, hasta que obtengas una masa suave y elástica. Si notas que la masa está demasiado pegajosa, puedes añadir un poco más de harina, pero evita excederte para que los beignets no queden duros.
2. Reposo de la Masa
- Dejar reposar la masa: Una vez que la masa esté lista, cúbrela con un paño limpio y déjala reposar en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que la masa haya duplicado su tamaño. Este paso es crucial para que los beignets queden ligeros y aireados.
3. Formado de los Beignets
- Amasado suave: Después de que la masa haya reposado, transfiérela a una superficie ligeramente enharinada y amásala suavemente durante un par de minutos para liberar el aire que ha quedado atrapado durante el proceso de fermentación.
- Estirado y corte de la masa: Con un rodillo, estira la masa hasta que tenga un grosor de aproximadamente 1 cm. Utiliza un cortador de galletas redondo o un vaso para cortar círculos de masa. Si quieres ser más creativo, también puedes usar cortadores de diferentes formas.
4. Fritura de los Beignets
- Calentar el aceite: En una sartén profunda o cacerola, calienta abundante aceite de girasol a fuego medio-alto. Es importante que el aceite esté a la temperatura correcta (160-170ºC) para que los beignets se cocinen de manera uniforme y no absorban demasiado aceite.
- Freír los beignets: Una vez que el aceite esté caliente, comienza a freír los beignets en tandas, asegurándote de no sobrecargar la sartén. Fríelos durante unos 2-3 minutos por cada lado, o hasta que estén dorados. Luego, retíralos del aceite con una espumadera y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
5. Decoración y Presentación
- Espolvorear con azúcar glas: Mientras los beignets aún estén calientes, espolvoréalos generosamente con azúcar glas. Este toque final les da un aspecto dulce y tentador.
- Dejar enfriar y servir: Deja que los beignets se enfríen ligeramente antes de servirlos. Son perfectos para disfrutar solos o acompañados de una bebida caliente como un té aromático o un café.
Consejos para un Resultado Perfecto
- Temperatura del aceite: Asegúrate de que el aceite esté a la temperatura correcta antes de freír. Si está demasiado caliente, los beignets se dorarán demasiado rápido por fuera y quedarán crudos por dentro. Si está demasiado frío, absorberán demasiado aceite y quedarán pesados.
- Reposo de la masa: No omitas el tiempo de reposo de la masa. Este paso es crucial para que los beignets queden esponjosos y ligeros.
- Variaciones de sabor: Si quieres experimentar, puedes añadir otros sabores a la masa, como ralladura de limón en lugar de naranja, o incluso un poco de cardamomo para un toque exótico.
- Almacenamiento: Los beignets son mejores cuando se disfrutan frescos, pero si te sobran, puedes guardarlos en un recipiente hermético a temperatura ambiente durante un par de días. Evita refrigerarlos, ya que pueden endurecerse.
Disfruta de Tus Beignets Caseros con Canela y Naranja
Ahora que tienes la receta completa, es hora de ponerte manos a la obra y disfrutar de estos deliciosos beignets caseros. El aroma de la canela y la naranja llenará tu cocina y te aseguramos que no podrás resistirte a probar uno recién hecho. ¡Buen provecho!